Año 2009
SINOPSIS:
Más allá de la urbanización está el bosque. Ese bosque oscuro y silencioso en el que los niños escapan para perseguir fantasmas, miedos y leyendas. Son sólo juegos. Hasta que no vuelven. La tarde del 14 de agosto de 1.984, tres niños de doce años, Jamie Rowan, Peter Savage y Adam Ryan, se adentraron en el bosque de Knocknaree, en las afueras de Dublín, nunca más salieron de él. Aunque la Policía encuentra esa misma noche a uno de ellos, Ryan, abrazado a un roble, con los zapatos llenos de sangre y un rostro de espanto, incapaz de recordar nada de las horas anteriores. Veinte años después, Ryan intentará definitivamente escapar de aquel bosque. Ahora se hace llamar Rob, es detective de Homicidios y sigue guardando con celo aquella pesadilla de la infancia. Hasta que encuentran el cuerpo de una niña de doce años asesinada en un escenario difícil de olvidar: el mismo bosque, el mismo terror, ninguna pista.
Rob está indudablemente marcado por su pasado y durante toda la investigación del asesinato de Katy, una niña de la misma edad que sus amigos desaparecidos hace veinte años atrás, intenta por todos los medios a su alcance descubrir qué sucedió ese verano de 1984, convencido que la muerte de Katy está relacionada con los sucesos de su infancia.
Durante el transcurso de la narración va reviviendo una y otra vez acontecimientos del pasado, recordando escenas y aventuras vividas con sus dos amigos Peter y Jamie deseando recordar... manteniendonos en vilo a la espera de que nosotros descubramos con él lo que sucedió ese fatídico día de agosto. Ese contenido psicológico es muy interesante, ver la evolución destructiva que sufre Rob a lo largo de la investigación y como afecta a su compañera Cassie, quién le apoyará de forma incondicional a pesar de que ella tiene otra teoría muy distinta sobre el caso actual. Ha sido difícil soltar el libro, tanto, que la lectura ha sido casi de un tirón.
Me ha sorprendido el final -aunque no voy a desvelaros nada, por supuesto-, descubrimos a los culpables, sí, peeeero, algo se queda en el tintero y si bien sorprende, a mí personalmente me ha gustado el final.
"Empieza cada día con la melodía de la furgoneta de helados y tu mejor amigo llamando a la puerta, y termina con un crepúsculo largo y lento y las siluetas de las madres en los umbrales llamando para que volváis, a través de los murciélagos que rechinan entre los saúcos. Este es el Verano, engalanado en toda su gloria."
"Te lo advierto: recuerda siempre que yo soy detective. Nuestra relación con la verdad, aunque primordial, es fragmentada, confusa y refracta la luz como trozos de cristal."
"Lo que quiero dejar claro antes de empezar mi historia son estas dos cosas: anhelo la verdad. Y miento."
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